Calor de tu sonrisa
me invita a no dejarte
calor de tu sonrisa
invítame a abrazarte
Pero no solamente
abrazo tu persona
tu singularidad
Quédate conmigo
para disfrutar
momentos de gloria
paz y bienestar.
Había una vez una joven de nombre Lourdes, cuyo corazón latía al ritmo de la escuela. Sus notas destacaban siempre por su excelencia, result...
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